top of page

Silencio y vacíos en la investigación sobre los captores de Dayra Caicedo

  • Foto del escritor: Grisel Bethancourt
    Grisel Bethancourt
  • 18 mar
  • 5 Min. de lectura

Actualizado: 20 mar



Oldemar Forth Moya estuvo presuntamente en la escena de la privación de libertad de Dayra Caicedo; desde hace tres semanas no se le ha mencionado públicamente.


El 19 de febrero, la estudiante y empresaria Dayra Caicedo fue interceptada por varios delincuentes al llegar a su residencia en Vista Alegre de Arraiján. Desde ese momento, su paradero es desconocido. Mientras las autoridades continúan con las investigaciones, aún no se ha determinado un motivo claro para su desaparición.


Las primeras imágenes de su secuestro generaron una inmediata reacción pública y llevaron a la emisión de una alerta del Ministerio Público para capturar a uno de los principales sospechosos: Oldemar Alexis Forth Moya. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos iniciales, en las últimas tres semanas no se ha vuelto a mencionar, lo que ha generado incertidumbre en la opinión pública.


Pero no se trata solo de Forth Moya, sino de al menos otras tres personas que, junto a él, según las investigaciones ejecutaron la privación de libertad y desaparición de la estudiante de derecho de la Universidad Santa María La Antigua.


Anuncio realizado por el Ministerio Público.
Anuncio realizado por el Ministerio Público.

Otras dos personas son investigadas por el Ministerio Público durante un período de seis meses. Se trata de una pareja que actualmente se encuentra bajo medidas de detención, aún no se establece una vinculación directa con Forth Moya ni con otros tres sospechosos.


A pesar de la gravedad del caso, la institución policial mantiene silencio en sus redes sociales sobre la búsqueda de Forth Moya y de quienes lo acompañaron la noche del 19 de febrero. Esta falta de información ha dado pie a diversas teorías sobre lo sucedido hace tres semanas, incluyendo la posible implicación del crimen organizado.


La versión del Ministerio de Seguridad apunta a la relación con pandillas, según lo expresó el titular Frank Abrego. Mientras tanto, los responsables parecen haberse desvanecido sin dejar rastro, lo que aumenta la incertidumbre sobre el paradero de la víctima.


Este medio obtuvo información del Órgano Judicial (OJ) sobre la supuesta aprehensión de una tercera persona en el caso, anunciada por el director de la Policía, Jaime Fernández. Sin embargo, la Secretaría de Comunicación del OJ, negó la existencia de un nuevo detenido vinculado a la privación de libertad de Dayra Caicedo. "No hay nadie que haya sido presentado ante un juez de Garantías", confirmaron, dejando en entredicho la versión policial y generando más dudas sobre el avance de la investigación.

 

Versiones cruzadas en el Tribunal

El 19 de febrero, Dayra Caicedo fue interceptada dentro de su vehículo mientras se estacionaba y acorralada por cuatro personas. Aunque pidió auxilio, su familia poco pudo hacer, ya que fueron amenazados con armas, según se observa en el video que ha circulado.


Desde ese momento, comenzó su privación de libertad y desaparición. Dayra fue trasladada a otro vehículo y, con el paso de los días, los investigadores aseguran haber vinculado a dos presuntos sospechosos, quienes hoy están imputados. Ambos, fueron detenidos por separado en Parque Lefevre, ciudad de Panamá, a unos 32 kilómetros de distancia, aproximadamente 45 minutos en auto del lugar del hecho.


Durante la última audiencia, realizada la semana pasada ante el Tribunal de Apelaciones, integrado por tres magistrados (dos mujeres y un hombre), se hicieron preguntas directas a la fiscalía. Uno de los magistrados cuestionó el recorrido de un vehículo que, según la investigación, estuvo en dos lugares distintos: una ruta desde Panamá Oeste por el Centenario–Merca Panamá, desde donde se realizó una llamada de Julio Bayo a su pareja, y otra versión que indica que Bayo tomó la ruta del Corredor Sur y cruzó un peaje.


Otra pregunta del magistrado de Apelaciones, se enfocó en la presunta participación de la mujer imputada, ya que, según la investigación, ella permanecía en su residencia en Panamá Viejo a la hora del secuestro.


Los informes de la investigación indican que existe una llamada de Julio Anel Bayo a su pareja la noche del crimen. El otro elemento que argumenta la fiscalía es el testimonio de un informante —cuya identidad no ha sido revelada— según el cual la imputada trasladó presuntamente en un vehículo a su pareja desde Panamá Viejo. Sin embargo, personas consultadas por este medio, que prefirieron el anonimato por seguridad, aseguran que la mujer no salió de Panamá Viejo esa noche y que era habitual que conversara todas las noches con su pareja por teléfono. No se mencionó algún video o algún elemento de los autos en el recorrido.


Según una fuente, la imputada no conoce personalmente a Dayra Caicedo. Aunque hizo compras en su almacén, no fue la víctima quien la atendió, sino un familiar. Este sería un elemento que sustenta la fiscalía ocurrido días antes del hecho.


Tras la privación de libertad de la estudiante, se desplegaron operativos en Panamá Viejo en la madrugada y a plena luz del día, como el punto de referencia en la que se centraron, pero no hubo rastros de la víctima.


Lo más reciente, hace 48 horas se aseguró de una tercera captura. La supuesta persona que alegó tener la Policía no fue presentada ante un Tribunal de Garantías en Panamá Oeste. Archivos Abiertos pidió información al Ministerio Público, pero no se dio una respuesta al cierre de la nota.


Los datos recopilados en la investigación se basan en testimonios de informantes, mientras que un iPhone perteneciente a la víctima sigue sin aparecer. Según la versión de un testigo, el celular estableció un perímetro entre Santa Elena y Panamá Viejo; sin embargo, la fiscalía no sustentó bajo un peritaje forense su versión del iPhone cuando fueron consultados por el magistrado en la audiencia de apelación.


La vida de Dayra

"No hay transparencia y la investigación está mal enfocada en la búsqueda de la víctima. Lo importante es encontrar a Dayra, pero se habla muy poco de su búsqueda", señaló Julio Alonso, asesor en investigación criminal y miembro de la Asociación de Profesionales de Investigación y Ciencias Forenses.


Alonso, exinvestigador de Homicidios, de la Unidad Antisecuestro y Narcóticos de la otrora Policía Técnica Judicial, sostiene que en la mayoría de los casos de privación o contra la libertad individual, si no se solicita un rescate en un plazo de tres días, es más difícil identificar el móvil del crimen.


"En muchas ocasiones, las líneas de investigación se desvían debido a información errónea y sin el respaldo técnico-científico necesario", puntualizó Alonso.


Todo apunta, según el experto, a que la investigación se ha alejado de la rápida captura del principal sospechoso y otros tres involucrados, así como de esclarecer el móvil que llevó a la privación de libertad de la joven.


Oldemar Forth Moya, principal sospechoso del hecho criminal, tiene antecedentes y, según fuentes consultadas, operaba en Panamá Este.


La madre de Dayra Caicedo, en declaraciones a Telemetro Reporta el pasado 21 de febrero, pidió desesperadamente que le devolvieran a su hija. "Soy de Darién, si hay personas involucradas en esto, por favor, vean el sufrimiento que tengo… Necesito que mi hija vuelva".


Pasan los días y horas sin fe de vida. Hasta el momento, no se conoce oficialmente del ofrecimiento de recompensa por las autoridades de investigación para obtener información sobre el paradero de Dayra, como se hace en otros casos; ni tampoco de la solicitud de un rescate por los captores para ser devuelta a su familia.  



 

Comments


bottom of page